Hola, saludos desde lo más profundo del bosque.
La semana pasada se cumplió el primer año de vida de la newsletter. Y 46 ediciones después, aquí seguimos, deseando compartir más cabañas con vosotros durante mucho tiempo, y continuar con algunos proyectos cabañiles interesantes para este 2022. Gracias.
Empezamos.
El Sonido
Últimamente tengo bastante insomnio. De ese que dura semanas. Y cuando eso sucede, me pongo los cascos y solo suena Sleep de Max Richter. Este álbum dura exactamente las 8 horas de sueño que necesita un ser humano cada día, y Richter lo compuso de acuerdo a las diferentes fases del sueño, así como melódicamente armonioso para facilitar que durmamos.
Como curiosidad, os contaré que la gira de este disco pasó por Madrid, en 2017, y más de 400 personas “durmieron” las ocho horas que tocó.
La cabaña
En Noruega, hay una cabaña que es todo un homenaje a la tradición rural de la zona. Basada en la arquitectura vernácula e incluso en el románico nórdico, esta casa ama el paisaje y lo incluye en la vida diaria de sus habitantes. El estudio Rever & Drage Architects quiso darle esa inspiración dramática e histórica a un proyecto aislado y sostenible.
Las cabañas como tales se introdujeron en esta área a mediados del siglo XX, como lugar de vacaciones para familias de clase alta, ya que es una zona típica de granjas y refugios naturales. En conjunto, la cabaña tiene la forma de esas granjas tradicionales, fusionando su aspecto más clásico en la estructura, pero moderno con el uso de los materiales y color, identificándose con otras de la zona. En otoño, las paredes de la fachada, de madera y piedra, se confunden con el bosque de álamos, con su tono amarillo ocre, camuflando la vivienda en el paisaje.
Es característica la entrada de la casa, da al fiordo y su forma redondeada está definida por la cornisa en la que se sitúa. El arco interior, de hormigón, equilibra la viga y la vista, contrastando con el bosque pero sin ser agresivo con el horizonte. Personalmente, me parece un detalle original y muy interesante en este tipo de construcción, junto a los grandes ventanales y su uso inteligente de la madera.
Podéis ver más imágenes del proyecto en la web de los arquitectos.
Viajar
Esto es una frikada, pero hay casas-cueva que imitan las pequeñas casas de los Hobbits de El Señor de los Anillos. Están en Galicia y son varios apartamentos rústicos, integrados en el paisaje, con un impacto mínimo en el mismo.
Admiten mascotas (que muchos me lo preguntáis).
Podéis reservar en su web.
Curiosidades
The Holiday es una de mis películas navideñas favoritas. Y aunque ya hemos terminado esa parte tan amada-odiada del año, aún nos queda un poco de resaca. Pero no vengo a hablaros de la película, ni del romanticismo artificial de las comedias de este tipo, sino de una de sus grandes protagonistas: la pequeña cabaña (cottage) de Surrey en la que vive Kate Winslet.
Esta pequeña casa de piedra es, sin duda, uno de los espacios más acogedores y con filosofía cabañil que he visto en el cine. Su chimenea, su pequeña cocina llena de detalles. Esas escaleras que te recuerdan un poco a cualquier casa de época que sale en las novelas de Jane Austen, y mi lugar favorito: la bañera (hala que le han escrito incluso una carta de amor).
Aunque Rosehill Cottage no existe en la vida real (los exteriores se construyeron de cero y los interiores, en su mayoría, son decorados), está inspirada en una casa llamada Honeysuckle Cottage en Holmbury St Mary. Lo interesante, es que esta cabaña se ha convertido en un fenómeno decorativo, combinando lo mejor del estilo inglés rural, desde la piedra a las vigas de madera, el desorden e incluso el aspecto viejo de los escalones proporcionan un atractivo único, que la convierte en una de las escenografías favoritas del cine.
Resulta que este cottage en medio de la campiña inglesa se vendió hace un par de años a una pareja que desconocía totalmente la fama que tenía. Aquí podéis leer la historia.
Os confieso que sueño demasiado con esa bañera por las noches.
#Cabin
Esta casa en el árbol de la ceramista Raina Lee es toda una fantasía.
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Hay un documental que se llama Taming the garden que sigue el viaje de un árbol centenario, muy antiguo, a la parcela de un magnate georgiano. Una crueldad para un árbol, que se une a los otros 200 que se arrancaron de su lugar para crear un jardín de recreo para este señor rico. Es tan triste y duro como apasionante.
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¿Qué me decís de esta bañera de madera para exterior? Es de Goodland y es sostenible y perfecta para montarte un jacuzzi en medio del bosque.
Biblioteca Walden
Este maravilloso libro cayó en mis manos hace poco, como regalo por mi cuarenta cumpleaños. Cabañas para pensar analiza la historia de diferentes estructuras y cabañas, íntimas de escritores, cineastas, filósofos… Estableciendo una relación entre esa privacidad, el lugar y el proceso creativo. Desde Virginia Wolf a Bernard Shaw o Mahler y con fotografías de Eduardo Oteiro.
Podéis conseguirlo aquí y, como siempre, en vuestra librería favorita.
Tu casa, tu cabaña
Hoy os quiero compartir un pequeño capricho, esta butaca que ha creado Nido en colaboración con Simorra. La Pita, como se llama, tiene su nombre por la abuela de Tessa, cerebro creativo de Nido y The Home Hunter y amiga desde hace años. Todo lo que hace, sale del corazón, y este sillón de lectura es un ejemplo de ello.
Discretamente, se adapta al espacio con una estética atemporal, sutil y neutral. Acompaña a tus movimientos. Arropa sabiendo que está ahí sin mucho protagonismo. La tenéis en tres colores, beige, terracota y verde, se hace artesana a mano y podéis conseguirla aquí.
Algunas anotaciones:
La imagen de cabecera es de Slow Roads
Aunque Sleep dura ocho horas, hay una “versión abreviada” en vinilo que merece mucho la pena y solo dura 90 minutos, por si no tienes tanto tiempo y te apetece desconectar una horita y media.