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Una cabaña en Letonia llena de herencia diseñada por Vipp. Una escapada espectacular a uno de los valles más bonitos de Alaska. La historia de un tilo treehouse alemán y un ginkgo biloba que es otoño.

Hola, saludos desde lo más profundo del bosque.

El otoño llega cuando el ginkgo biloba más viejo del mundo (800 años) se torna amarillo. Todo un festival de color y de celebración de la mejor estación del año. Este árbol tan majestuoso se encuentra en Corea y es todo un espectáculo a la vista.

Empezamos.

Vipp es una de las marcas de diseño más importantes del mundo, desde 1932 innovando en creatividad e interiorismo. El diseño de su cubo de basura con pedal se encuentra en el MoMA. Además de crear algunas de las cocinas más bonitas del mundo, tienen un proyecto cabañil paralelo. Acaban de presentar su nuevo refugio en Letonia, una reforma de una casa vernácula en el bosque de 1876.

Se trata de una antigua casa de pescadores, en un bosque entre Riga y Wolmar. Junto al estudio de arquitectos Xcelsior, convirtieron este lugar abandonado en una casa familiar, y reubicaron la vivienda en el corazón del Parque Nacional de Salaca. Cada tronco de la cabaña se numeró y se transportó de forma segura a su nueva localización, donde se volvió a montar sobre unos cimientos de 180 piedras, manteniendo así la herencia de la arquitectura del lugar.

Se mantuvo el espíritu rústico a la vez que se llevó a un interiorismo más contemporáneo, siempre con el diseño minimalista escandinavo como base. La cocina (modelo V1) la ideó el equipo de Vipp, y todos los materiales y paleta de color se mantuvieron en tonos naturales y oscuros preservando esa idea rural, creando la idea de una especie de cueva y refugio donde desconectar.

La demostración, una vez más, de que lo antiguo se puede llevar a lo más confortable del siglo XXI sin perder su esencia.

Se puede reservar, todo un sueño cabañil.

Alaska me obsesiona enormemente. Después de ver estas cabañas aún más. A 3000 metros de altura en las montañas Talkeetna, al sur, este alojamiento de cabañas en A de madera es todo un lujo de desconexión casi absoluta: no hay agua corriente, apenas cobertura y las vistas al valle son espectaculares.

Si te aventuras a un viaje por allí, puedes reservar en su web.

David Hockney, Contrejour in the French Style (1974). Aguafuerte y aguatinta en papel de estraza. Prueba de artista subastada en Christie’s de esta obra.

El Tazlinde de Pesteen es un raro árbol del tilo con forma cúbica que se encuentra en Pesteen, al sur de Alemania, en la zona de Bavaria y que tiene una construcción de madera en su interior, que el pueblo ha ido manteniendo durante siglos. Se plantó entre 1550 y 1600, y en 1858, se describía así:

"En las ramas, que se extienden por todo el árbol, hay una habitación de 87 metros cuadrados, a la que se sube por una escalera de caracol de piedra de 22 peldaños con barandillas de hierro. El suelo de esta sala del tilo está cubierto de tablones de roble y las paredes circundantes son también de roble pintado de verde, sobre las que se extienden las ramas del árbol que forman un denso muro de follaje. Una amplia puerta da acceso a la sala del árbol. Desde 11 huecos de ventana, cada uno de 90 cm de ancho y 120 cm de alto, se puede disfrutar de una vista sin obstáculos de los encantadores alrededores y del valle del Meno.

La estructura artificial descansa sobre 12 pilares de piedra en el borde mismo, a menos que se apoye en el propio árbol. La altura de la sala desde el suelo hasta el techo es de 2,10 metros, y podría añadirse fácilmente un segundo piso. El diámetro del árbol es de 1,20 metros. Las cuatro ramas más grandes, en las que se divide el tronco en la parte superior, tienen un diámetro de medio metro".

Durante el siglo XIX algunos capitanes y gente de postín celebraba banquetes en su interior, donde cabían hasta 200 personas. Sin embargo, dos guerras mundiales, la vejez y el clima hicieron que en 1947 tuvieran que retirase los restos del árbol, que se encontraba debilitado. En 1951 se plantó un nuevo tilo, de la misma especie, que fue creciendo lo suficiente hasta que finalmente, entre 1994 y 2001 se reconstruyó por completo la estructura original del siglo XVI.

Encontré la historia aquí. Y puedes conocer más sobre este curioso árbol en su web.

Esta cabaña-refugio de pescadores diseñada por Laure Friès para el Festival des Cabanes (ya hablaremos otro día de esta fantasía de festival) este año. Tiene una superficie de diez metros cuadrados y una altura de cuatro metros y medio. Está fabricada en madera y se inspira en las montañas de la zona con su forma triangular.

La decisión de comenzar una vida en el campo será una semilla que dará sus frutos: un viaje iniciático como alegoría de una actitud vital. En Dar el salto nos sumergimos en una aventura de evolución y de aceptación que marcará la línea a partir de la cual afrontar la convivencia en una nueva comunidad. La resistencia del entorno a los cambios y a una inminente metamorfosis es contrarrestada a través de dos poderosos artilugios: el arte y la cultura, como salvoconductos para lograr la paz y la armonía. En todo tiempo convulso hay un momento en el que lo viejo aún no ha desaparecido y lo nuevo no termina de llegar. En ese punto de in exión, Alba se detiene para abordar con profundidad y humor las grandes cuestiones universales del crecimiento personal. Con su mirada reveladora consigue fusionar unas sutiles ilustraciones a un texto provocador, logrando integrar en una misma obra la pintura, la poesía y el pensamiento crítico.

Edita Vegueta Ediciones.